lunes, 7 de mayo de 2012


EL Dios Materia:
Increable e Indestructible

“Las formas fundamentales de todo ser son el espacio  y el tiempo, y un ser concebido fuera del tiempo  es tan absurdo como lo sería un ser concebido fuera del espacio”.
 -Engels
El Materialismo…
En 1674, se introdujo en el vocabulario filosófico el término "materialista", del que luego se formó el vocablo "materialismo" para designar la doctrina defendida por todo autor que mantuviera una filosofía según la cual la realidad está compuesta de corpúsculos que poseen propiedades mecánicas y actúan unos sobre otros de acuerdo con leyes mecánicas expresables matemáticamente.
Los términos "materialista" y "materialismo" derivan de "materia", palabra de origen latino que originariamente significaba Silva ("bosque") y que, en cuanto material de construcción (lignum), designaba los troncos destinados al fuego. En español, el término latino materia constituye el origen de "madera" (Berceo, Santa Oria, 89 b) o "madero" (con significado de lignum), y en portugués, de madeira. El vocablo puede usarse como nombre de un objeto (lo mismo que "hombre" o "mesa"), como designación del material de que está hecha una cosa (lo mismo que "harina" o "madera") o como término que indica una totalidad (lo mismo que "mundo" o "cosmos").


El Materialismo Dialectico
La expresión "materialismo dialéctico"  fue acuñada por Plejanov. Engels, creyendo completar a Marx, formuló el materialismo dialéctico en su obra de 1878 La transformación de las ciencias por el Sr. Duhring (Anti-Dühring) y en una serie de manuscritos escritos en los años 1873-1883 y publicados por vez primera en 1925 con el nombre de Dialéctica de la Naturaleza. Para Engels, el materialismo dialéctico afirma que los fenómenos materiales son procesos dirigidos por las leyes dialécticas del paso de la cantidad a la cualidad, de la interpenetración de los contrarios y de la negación de la negación.
El materialismo dialéctico parte, en principio, de los mismos supuestos de todo materialismo: sólo existe materia y movimiento, o la materia, sus procesos, sus cambios y evoluciones, cuya explicación se halla mediante la dialéctica, en un sentido invertido respecto del que le diera Hegel. Esta filosofía materialista la expone Engels sobre todo en su obra Dialéctica de la naturaleza (publicada en 1925), donde formula las tres leyes que rigen en esta dialéctica:
1) La ley de la unión y la lucha de contrarios: el principio de movimiento y desarrollo no reside fuera de las cosas ni procede por supuesto de un primer motor, sino de las contradicciones de la naturaleza, que Engels interpreta como una refutación del principio de no contradicción (más adelante se negó que éste fuera el sentido de esta ley y se habló más bien de tendencias contrarias en la naturaleza y en la sociedad).
 2) La ley del paso de la cantidad a la cualidad: la ley de la transformación de la materia universaliza para toda la naturaleza que el cambio no consiste en una mera agregación de elementos, sino que, supuesta una determinada cantidad de los mismos, se pasa a una nueva integración o a una transformación en un todo de tipo superior, a una cualidad, en un momento determinado que depende de la naturaleza de cada fenómeno material: así como el aumento de temperatura obliga a un cambio de estado, esto es, a una nueva organización de la materia, así también el aumento de complejidad en un sistema nervioso lo convierte en un psiquismo de orden superior capaz, por ejemplo, de pensamiento y conciencia.
3) La ley de la negación de la negación: es el desarrollo de la característica de la dialéctica hegeliana que mejor explica la idea de progreso, porque toda novedad surge como contradicción de un primer estado, que a su vez es negada o suprimida, por lo que hay una vuelta a un estado semejante al primero, pero en una condición más elevada; la planta es negación de la semilla, pero un proceso ulterior lleva a la negación de la planta que se transforma de nuevo en multitud de semillas.
Engels establece que estas leyes son universales y se cumplen en la naturaleza, en la sociedad humana y en el pensamiento, manteniendo la misma idea de Hegel que sostiene que el pensamiento es dialéctico porque lo es la naturaleza. Todo materialismo se convierte en una negación de Dios, debido a su concepción de que la materia es eterna e increada (“la materia no se crea ni se destruye sólo se transforma”), dejando por consiguiente el lugar de Dios reducido únicamente a una imagen medieval.
El materialismo dialéctico es la corriente del materialismo filosófico de acuerdo a los planteamientos originales de Friedrich Engels y Karl Marx que posteriormente fueron enriquecidos por Vladimir I. Lenin. Esta corriente filosófica define la materia como el sustrato de toda realidad objetiva (física) y subjetiva (el pensamiento) e interacción de la misma, emancipa la primacía e independencia de la materia ante la conciencia y lo espiritual, declara la cognoscibilidad del mundo en virtud de su naturaleza material, y aplica la dialéctica –basada en las leyes dialécticas propuestas por Hegel– para interpretar el mundo.
El materialismo dialéctico, como sistema filosófico, es una concepción e interpretación del mundo opuesta al idealismo filosófico representado por la concepción mágica de la religión y su primacía del espíritu (Dios) por sobre la materia. Como tal, el materialismo dialéctico se apoya en los datos, resultados y avances de las ciencias y su espíritu se mantiene en correspondencia y vigencia con la tradicional orientación progresista del pensamiento racional científico. Asimismo está opuesto a la corriente filosófica del agnosticismo al declarar la cognoscibilidad del mundo en virtud de su materialidad y de su existencia objetiva en el tiempo y en el espacio.
Engels y Marx sintetizaron su materialismo dialéctico a partir de su demoledora crítica del materialismo mecánico de Ludwig Feuerbach y a la dialéctica idealista de Hegel. Al materialismo de Feuerbach lo consideraron como un materialismo influido por corrientes del pensamiento filosófico metafísico e idealista.  De la dialéctica hegeliana Engels dice que ésta se encontraba cabeza abajo con Hegel y que fue Marx quien la colocó sobre sus pies. Posteriormente, Engels describió las leyes de la dialéctica en su obra Anti-Duhring.
 “Igual que Darwin descubrió la ley de la evolución en la naturaleza, Marx descubrió la ley de la evolución en la historia humana”.
-Friedrich Engels.

La pobreza y la explotación en todas sus formas están destinadas a ser eliminadas por la acción de la ley natural como resultado de la revolución proletaria. Igual que el marxismo predecía el final de toda explotación en la era comunista, Spencer predecía una sociedad futura en la que los deseos de cada persona se equilibrarían con los deseos de los demás, y unos y otros con los medios de satisfacerlos a todos.
Marx demostraba que en el progreso a través de la lucha, lo peligroso era que, una clase fuera incapaz de reconocer a la otra como enemiga. La lucha de clases es simplemente una expresión de la irreconciliable competencia entre el proletariado y al burguesía por el control de los medios de producción. Para Marx la lucha por la supervivencia en la naturaleza no justificaba la existencia de una lucha similar en la sociedad; antes al contrario, sólo el capitalismo era culpable de la semejanza existente entre la condición animal y la humana.
Al igual que los todos evolucionistas culturales del siglo XIX, Marx y Engels construyeron su propio esquema de estadios históricos. Por medio de eso estadios podía medirse el grado de progreso comunista.
1.      El primer estadio se presenta como el de la “propiedad tribal” Asociada a “un estadio de producción rudimentaria en le que los pueblos viven de la caza y de la pesca, de la cría de animales, y en su fase más avanzada, de la agricultura.
2.      El segundo estadio se basa en la “antigua propiedad comunal y estatal” y va acompañado por la formación de ciudades, producto de la fusión tribal voluntaria y de la conquista.
3.      El tercer estadio se basa en la “propiedad feudal”. Los señores feudales poseen tierras, cuyos trabajadores ya no son esclavos sino siervos.
4.      El último estadio, el del capitalismo, sólo se produce sobre la base del feudalismo, con la emergencia de una clase burguesa dedicada al comercio y ala industria.
Muchos de sus predecesores y de sus contemporáneos estaban convencidos de que el campo de los fenómenos socioculturales estaba regido por leyes naturales. El orden que hay en la historia humana no puede derivarse, como los filósofos ilustrados pretendían, del orden que hay en los pensamientos de los hombres. Los pensamientos están sujetos a condiciones previas que hacen más o menos probable su ocurrencia en individuos y en grupos de individuos.

“… no han hecho más que interpretar de diversos modos el mundo, pero de lo que se trata es de transformarlo”.
-Marx & Engels

Bibliografía:
·         Friedrich Engels, Anti-Dühring 
·         Friedrich Engels, Del socialismo utópico al socialismo científico 
·         Karl KorschMarxismo y filosofía 
·         Karl Marx. El Capital

No hay comentarios:

Publicar un comentario